El turismo en todas sus formas atrae a más de un millón de personas al borde marino costero en las temporadas altas y todos demandan playas y aguas limpias, seguras y ordenadas, con la responsabilidad de atenderlas de las autoridades nacionales, locales y la activa participación de actores locales en la prestación de bienes y servicios. Es cada año mayor la participación en actividades de avistamiento de ballenas, buceo, pesca deportiva, surf entre otros y, de hecho, es mayor el requerimiento de seguridad y ordenamiento para los mismos. De acuerdo con cifras del Ministerio de Turismo del año 2019, la contribución directa del turismo al PIB fue del 2.2%, con un ingreso de divisas estimadas de USD 2.287,5 millones de dólares por parte del turismo receptor, y 447.382 empleos, (MINTUR, 2020)